Aqui No Lloro Nadie.
Autor invitado:
Otto René Castillo
Aqui solo queremos ser humanos,
darle paisaje al ciego,
sonatas a los sordos,
corazon al malvado,
esqueleto al viento,
coagulos al hemofìlico
y una patada patronal
y un recuerdo que nos llora el pecho.
Cuando se ha estado debajo de las sàbanas viudas.
Cuando se ha visto transitar el hambre en sentido contrario.
Cuando se ha temblado en el vientre de la madre,
sin conocer aun el aire, la luz, el grito de la muerte.
Cuando eso nos sucede,
no lloran los ojos sino la sangre humana y lastimada.
Aqui no lloro nadie.
Aqui solo queremos ser humanos.
Recordarle la patria al desterrado
para verlo revolcarse en la nostalgia.
Cargar un pan en una calle de hambrientos
para que se lancen a mordernos hasta el alma,
darle cara de gallina a la miseria
para que la pueda devorar el hambre,
darle sabor de trigo a la saliva sola
y espìritu de leche a la tormenta.
Cuando se ha nacido entre pañales rotos y cuando se ha crecido sin pañales
Cuando nos han limpiado pulcramente el aparato digestivo.
Cuando se nos dice, comed, comed vuestra miseria, desgraciados.
Cuando eso acontece, no es llanto el que destilan las pupilas
es una simple costumbre de exprimir los puños en los ojos y decir:
Aqui no lloro nadie, aqui solo queremos ser humanos.
Comer, reir, enamorarse, vivir,
vivir la vida y no morirla.
Aqui no lloro nadie!