tierra
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Toj
Energìa fèrtil, es el corazòn del cielo, fuego interior. Nivela la justicia, la vida y la esperanza.
Moldea tus actitudes, practica la fidelidad, con paciencia y tiempo.
Mira y analiza las posibilidades para resolver tus problemas en tus actuaciones diarias.
Y porque tu sabes escuchar el mensaje de la Tierra, fortaleces muchos corazones.
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Kej
Es el conocimiento del poder a travès de la existencia fìsica.
Armoniza tu dìa con pensamientos que produzcan acciones positivas.
Cuida del agua, del viento, del fuego y de nuestra madre origen: la sagrada tierra.
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Ley Suprema
Proverbio Hopi
“… La ley suprema de la Tierra, es la ley del Gran Espíritu, no la ley del hombre…”.
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Sanaciòn
Humishuma, Paloma Matinal – SalishHumishuma“… Todo en la Tierra tiene su propósito, toda enfermedad tiene su hierba que la cura, y cada persona tiene su misión. Esta es la teoría de la existencia…”.
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Expresiòn – Enseñanza
Nosotros no heredamos la tierra de nuestros ancestros; solo la tomamos prestada de nuestros hijos.
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Expresiòn – Enseñanza
Cuando la sangre de tus venas vuelva al mar, y el polvo de tus huesos regrese al suelo, quizás recuerdes que esta tierra no te pertenece a ti, sino que tú perteneces a esta tierra. (Proverbio Sioux)
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El Popol Wuj
Autor Invitado: Humberto Ak’abal.
Mientras haya Sol,
mientras haya Luna
y mientras haya Estrellas
nunca serà demasiado hablar del Popol Wuj:
Palabra antigua, voz de los mayores,
cimiento de nuestra Tierra.
Que otro libro puede ser màs nuestro?
A donde irìamos para buscar nuestra identidad?
El canto de los vientos
nos traen las memorias del pasado,
en las voces de los vientos
resuena la voz de nuestros abuelos,
en la claridad de las aguas
estàn los encantos de Tojil.
Entre los bosques,
aguardan los tecolotes
mensajeros del inframundo,
El ombligo de nuestra historia
està en las cumbres del Cerro Jakawitz.
El Popol Wuj,
testamento de propiedad
de nuestras tierras,
testimonio
del nacimiento del tiempo.
Nunca serà demasiado, hablar del Popol Wuj.
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Ju’lajuj Keme
Autores Invitados : Carla Cofiño y Jose Coutiño.
En una cueva, todos los sonidos externos son suavizados por la roca y la tierra, pero esto hace que los sonidos del latir del propio corazòn y la respiraciòn sean audibles. De la misma manera, la quietud contemplativa nos aleja del clamor cotidiano, pero nos permite oir lo sutil en nuestras propias vidas.