Poesia
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Invocación al sol

Dáme siempre mi cielo azul,
hombre antiguo de rostro iluminado.
Dáme una y otra vez mi nube blanca,
alma vieja de cabeza encendida.
Dáme siempre tu dorado abrigo,
gran cuchillo de oro por quien
sobre la tierra estamos parados. -
Canción

Muchas flores bellas,
rojas, azules, amarillas.
Decimos a las muchachas:
«Vamos a pasear entre las flores».
El viento llega y mece las flores.
Las muchachas, cuando danzan, son como ellas.
Unas flores son grandes, son abiertas,
otras son florecitas pequeñitas.
Los pájaros aman al sol y a las estrellas.
El olor de las flores es muy dulce.
Las muchachas son más dulces que las flores. -
Grandeza del Poeta

Autor Invitado: YaocuicatlFlores forman un cerco
en el recinto de musgos acuático,
en el recinto de mariposas.
La tierra está matizada.Se difunde tu canto, se difunde tu palabra.
Sólo retumba allí y repercute.Múltiples son tus rojas mariposas:
en medio de mariposas estás y hablas. -
El Sabor de Nuestra Lengua

Autor invitado: Humberto Ak’abal
Cantan los pàjaros en nuestras palabras
aullan los animales
truenan las tempestades
se tronchan los àrboles………
Su eco viaja con el viento,
se hace espuma sobre las aguas,
se vuelve bruma sobre la tierra…….
Asì està hecha,
asì es el sabor de nuestra palabra.
Nuestra lengua maya-K’iche’,
es el oro que los castellanos
no pudieron llevarse.
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Mi Madre

Me regalò el universo entero, completo, invariable
el polvo de su cielo estrellado y la mirada de sus ojos dulces.
Ramillete de mariposas, sus abrazos en el arbol sin olvido.
Suaves sus valores, piràmides perfectas,
encanto de silencio en el bosque de un Quetzal en vuelo.
Plumaje esmeralda y el rojo intenso de un amor resplandeciente
en la bòveda, luz de hogar, bosque y antaño.
No se olvidò mi madre ……
Me obsequiò la luna, su pensamiento plateado, melancolìa de ensueño.
Posò su mano en la mìa, dejàndome un rayo del sol de medio dìa,
renaciò de nuevo la vida, la fè, la alegrìa y se reflejò el rostro de madre
manantial infinito del lìquido vital, en gajos de hojas amarillas para volver a nacer
Le gustaba la tierra porque somos Ella.
Admiraba las semillas de sus flores y los frutos
y asì en el fuego de las tardes, acogiò y atendiò con ternura solo de madre,
y como madre, soy memoria; legado.
Madre! hoy te devuelvo tambien mi universo.
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Voces

Autor invitado: Humberto Ak’abal
En el recuerdo
en la memoria
en la sangre.
Vienen de lejos
vienen de adentro
vienen de ayer:
Las voces de mis mayores.
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Dònde estoy?

Autor invitado: Humberto Ak’abal
Si pudiera cabalgar
sobre mi eco,
irìa en busca de mi yo.
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Migrante

Autor invitado: Humberto Ak’abal
Soy un ave migratoria,
vuelo hacia el pasado,
los recuerdos son mi futuro.
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Estallido

Autor invitado: Humberto Ak’abal
La gota de agua estallò
y se hizo estrella:
el charco se volviò cielo.
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A Saber

Autor invitado: Humberto Ak’abal
A saber què tenìa la lluvia,
me gustaba verla llover
y mirando, mirando, mirando
me dormìa parado y me caìa,
cuando mi madre me levantaba
yo tenìa la lluvia metida en los ojos.
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